Picapedrero
El Quijote
Bolívar y el chavismo
Al doctor Ramón Escovar León
por: Jorge Ramos Guerra
Al conmemorarse el cuarto Centenario de la muerte de Miguel de Cervantes, autor de la inmortal novela “El Quijote” luce oportuno interpretar ¿qué quiso decir Bolívar moribundo, a su hospitalario don Joaquín de Mier? <<"Jesucristo, Don Quijote y yo hemos sido los más insignes majaderos de este mundo>> Y es que, la novela de Cervantes es un espejo y nadie mejor puede dar fe de ello, que ese gran filósofo español Don Miguel Unamuno, en su obra “El Quijote y Bolívar”. La libertad para El Quijote, en consejo a Sancho Panza:… “es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar: por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida” y por el contrario, el cautiverio es el mayor mal que puede venir a los hombres”
Y Simón Bolívar se la planteo, al imaginársela y verla, debió haber pensado en tan hermoso consejo, para proclamarla por América, considerándola “apetecible” según Rousseau al decir: <<La libertad, dice Rousseau, es un alimento suculento, pero de difícil digestión” agregando Bolívar <<Nuestros ciudadanos tendrán que en robustecer su espíritu mucho antes que logren digerir el saludable nutritivo de la libertad>> Y de ese “nutritivo” proclamó que “la Libertad civil, la seguridad individual, la propiedad y la igualdad ante la ley se garantiza a los ciudadanos por la Constitución” y como si fuera poco en su quijotismo, se debió haber visto cómo cual Sancho, respondiéndole a su maestro Simón Rodríguez ..<<Usted formó mi corazón para la libertad, para La justicia, para lo grande, parao hermoso. Yo he seguido el sendero que usted me señaló>> Esa utopía quijotesca de Bolívar, la encuentra Unamuno en sus propias actuaciones y vivencias, como la muerte de su esposa Teresa, el “Juramento en el Monte Sacro”, “El Manifiesto de Cartagena, la “Carta de Jamaica”, “Mi Delirio sobre El Chimborazo”, “El Discurso de Angostura” ¡Toda una majadería!
Con todo aquello, El Quijote no se propuso crear a un Bolívar, pero si retrató la sociedad de su tiempo en sus novelas ejemplares, para combatir las injusticias y desterrar a los picaros en la Sevilla del siglo XVII, donde si bien era cosmopolita, existían cofradías del hampa, robos, asesinaros y “venganzas por encargo” al mando de un tal “Monipodio” y sus secuaces, “Rinconete y Cortadillo”, cuales mafias del siglo XVII, aún viven en el siglo XXI venezolano, en manos de un “Monipodio” chavista <<Cosas veredes Sancho>> que deja desnudo a todos, sus anteriores depredadores públicos, con el agregado a la corrupción, del narcotráfico entre civiles y militares, uno y otro deben operar en armonía, contando a su vez, estrechos vínculos políticos y judiciales, acaso solo, a los medios de comunicación, puedan temer y redes sociales que les espantan, porque atizan sus inescrupulosas empresas. La ética por tanto, “echa a perder los negocitos de los compañeros, compatriotas y cooperantes”, su denuncia entonces, entre la clientela partidistas, donde el tema de la corrupción o el narco, que atenta contra quien detenta el poder, es nociva debe desterrarse. Pues bien, esa típica sociedad sevillana escandalizó a Don Quijote y aún con ello, recomendó a Sancho Panza, al erigirse como gobernante de la Ínsula de Barataria.:
.. “Primeramente, ¡oh hijo!, has de temer a Dios, porque en el temerle está la sabiduría, y siendo sabio no podrás errar en nada. Lo segundo, has de poner los ojos en quien eres, procurando conocerte a ti mismo, que es el más difícil conocimiento que puede imaginarse. Del conocerte saldrá el no hincharte como la rana que quiso igualarse con el buey, que si esto haces, vendrá a ser feos pies de la rueda de tu locura la consideración de haber guardado puercos en tu tierra”. ¡Temores! ¿En la Venezuela del 2016? solo existen, al incautarse dólares y ver sus soles, brillando en la DEA y a su justicia, donde ya los consejos no tienen eco, al no atenderse la “misericordia” que el mismo Quijote, recomendó a Sancho:
… “Al culpado que cayere debajo de tu jurisdicción considérale hombre miserable, sujeto a las condiciones de la depravada naturaleza nuestra, y en todo cuanto fuere de tu parte, sin hacer agravio a la contraria, muéstratele piadoso y clemente, porque, aunque los atributos de Dios todos son iguales, más resplandece y campea a nuestro ver el de la misericordia que el de la justicia”.
Esa “misericordia” terrenal, es tabú para la cofradía de “Monipodio” chavista, por eso, la Centenaria y universal novela de Don Miguel de Cervantes y Saavedra, gana vigencia y como la espada de Bolívar, en manos de “Monipodio” comprara conciencias por la América Latina, ahora, con El Quijote, cóbrense las deudas y pídanse disculpas, en nombre de esos majaderos de la historia… “Jesucristo, El Quijote y Bolívar”
Jorge Ramos Guerra
@pikpedrero
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